A una lagrima obscura


"Ciego sería el que llorara"

¿No íbamos a convertir en música todo lo que tocáramos?
¿No tocaba vaciarse uno en el otro eternamente?
¿No faltaba aún lo mejor de nuestros mundos?
Se va olvidando, se va olvidando

Obscurécete entre mis manos
ya se irá acabando el mundo después de nosotros

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
Me gustaron los poemas. Me gusta esa voluntad de construcción. Felicidades.
Alí Calderón

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